Se habló en este blog de...

7.8.17

Narcos. Temporada 3



Una de las mejores y más exitosas series de los últimos años vuelve con una nueva temporada. Finiquitada la tremenda historia de Pablo Escobar, esta vez la trama de la serie se centra en el cartel de Cali, por lo que sigue situada en la siempre turbia Colombia. Algunos de los protagonistas que ya vimos en las dos temporadas enteriores vuelven a aparecer  como Pedro Pascal que interpreta al agente Peña y a Boyd Holbrook que da vida al agente de la DEA Steve Murphy. Al mismo tiempo hay nuevas incorporaciones y sobre todo, conocidos del cine y la televisión en nuestro país como las de Alberto Ammann o Javier Cámara y Miguel Ángel Silvestre, que interpretarán a miembros del famoso cártel de la droga Colombiana. Netflix, después del exitazo de las dos primeras entregas, ha vuelto a apostar por la historia de los narcotraficantes más célebres y sus circunstancias llenas de excesos y ya se anuncia una cuarta. El estreno será el próximo 1 de septiembre y para ir abriendo boca el espectacular trailer en el que nos avisa que "El día que Pablo murió, el cártel de Cali se convirtió en el enemigo público número uno. Se hicieron llamar los caballeros de Cali, los capos más grandes de la droga".

3.8.17

12+1


Siete títulos mundiales en la categoría de125 cc y otros seis en 50cc. Doce más uno, que no es lo mismo que trece. Ángel Nieto ha fallecido a los 70 años. Es curioso que alguien que ha batallado durante tantos años en el mundo de las dos ruedas, que ha sufrido de innumerables accidentes poniendo en juego su vida por esa pasión de la velocidad y esa codicia que tiene el querer ser el número uno en algo, haya perdido la vida fuera de las pistas, con otro vehículo hecho también para disfrutar, pero no de dos ruedas sino de cuatro. La historia del motociclismo Español, tan en auge en los últimos años, tuvo un pionero, un precursor, alguien que abrió camino a los que vinieron detrás y tanta gloria le dieron a este deporte.

2.8.17

Lorca: Un poeta en Nueva York


"Poeta en Nueva York" debería ser considerado patrimonio de la humanidad, o al menos patrimonio cultural de este país, que con frecuencia menosprecia a sus grandes poetas y escritores o el reconocimiento les llega demasiado tarde, tan tarde que en la mayoría de los casos esos autores no viven para verlo. El caso de Federico, durante cuarenta años, más reconocido y leído en el extranjero que en España, es otro de los muchos que a día de hoy, a pesar de la trascendencia de su figura y legado, sigue sin tener esa difusión que con orgullo deberíamos propagar por cada rincón de este país. El cómic "Lorca, un poeta en Nueva York" nos muestra una particular y excelente visión sobre la estancia de Federico García Lorca en esta ciudad Estadounidense. A través de los testimonios de sus allegados y de las cartas que el poeta Granadino escribía desde la gran manzana, seremos partícipes de todas las pasiones, inquietudes y obsesiones de Federico.
Fue un 25 de junio de 1929 cuando desembarcó del transatlántico Olympic, con la compañía de su amigo y mentor Don Fernando de los Ríos.
"Pararé en América seis o siete meses y regresaré a París para estar el resto del año. Nueva York me parece horrible, por eso mismo me voy allí", le escribió  algunos días antes de partir a Carlos Morla Lynch, añadiendo, "Tengo además un gran deseo de escribir, un amor irrefrenable por la poesía, por el verso puro que llena mi alma todavía estremecida como un pequeño antílope por las últimas brutales flechas". Federico llegó a la cosmopolita ciudad con la sana intención de reparar cierto desengaño amoroso y del rechazo de sus amigos Buñuel y Dalí, tras su extraordinario éxito en España de su "Romancero gitano"
 Aquellos días de Lorca en Nueva York, ciudad con mil diferencias tanto culturales como sociales a la España y más en concreto a la Granada de finales de los años veinte del pasado siglo otorgará a nuestro poeta de una visión de la vida sensiblemente distinta a la que había vivido hasta entonces.
Los sueños del nuevo mundo, la multiculturalidad de los emigrantes, los negros de Harlem, el Jazz...
Cuando Federico regresó a España, todos pensaron que parecía otro, nuevo, renovado, y hay quien dice que aquella luz especial de ese viaje a Nueva York, le acompañó hasta aquella madrugada de agosto entre Víznar y Alfacar.

EL autor: Carlos Esquembre (Valencia, 1985) músico y dibujante formado en la Escola Joso de Barcelona. Ha trabajado como ilustrador freelance y realizado storyboards para producciones audiovisuales en Dacsa producciones, Timelapse creative Agency y Rimores Factory.
Su primera incursión en el cómic tuvo lugar en 2013, cuando se autopublicó "The body", un tebeo de ciencia ficción donde unos diminutos sanitarios son introducidos en el interior de un cuerpo humano enfermo. Además de eso, también ha participado en la antología "Visiones del fin", publicada por Aleta en 2015, pero "Lorca: un poeta en Nueva York"es su primera novela gráfica.

1.8.17

Mis infames favoritos del cine. Hoy: Apollo Creed


 Hoy comienzo una serie de publicaciones sobre unos personajes del mundo del cine que siempre me han fascinado. Los malos de la película. Y es que malos de la película los hay de muchos modos y maneras. Están los malos perversos, los malos atormentados, los sádicos, los terroríficos, los malos torpes de las comedias, los malos redimidos, los ángeles caídos y muchos más. No hay película que se precie que no tenga su malo. Algunos de ellos han pasado a la historia del cine con mucha más trascendencia que el héroe del film.  En muchas ocasiones hemos soñado en ser el malo de la película antes que el protagonista edulcorado y bonachón y nos ha dado una profunda rabia que ese villano muerda el polvo sin llevar a cabo sus más diabólicos planes. Otras, sin embargo, hemos odiado con todas nuestras fuerzas al malo y hemos echado toda nuestra ira en ellos deseando que su final sea cruel y doloroso, cosa que en ocasiones múltiples no sucede por el buen corazón del protagonista de la película.
Y comienzo hoy en referencia al post de ayer con la figura de Apollo Creed. Aunque convendría aclarar que el personaje de Apollo Creed sufrió una transformación desde su aparición a su dramática muerte. Comenzó como un tipo arrogante, narcisista, ambicioso,  provocador, burlón y prepotente que haciendo alarde de su generosidad ofrece un combate con el título mundial en juego a un desconocido boxeador de segunda categoría llamado Rocky Balboa. Todos, en esa primera película dirigida por John G. Avildsen le deseamos una dura derrota frente a Rocky, que efectivamente se produjo pero en la segunda parte de las aventuras y desventuras del potro italiano e in extremis.
Después, pasó a convertirse en mentor, consejero y entrenador en las horas más bajas del púgil de Filadelfia tras la muerte de Mickey, y posteriormente en su mejor colega el cual finalmente fallece a manos de otro malo malote de la saga, Iván Drago, el expreso de Siberia, que también tendrá espacio en este blog en breve.
Apollo Creed estuvo interpretado por el actor Carl Weathers en las cuatro primeras películas de Rocky. Hace un par de años, una especie de Spin off, aunque yo no la llamaría así, nos presentaba a el hijo ilegítimo del campeón de los pesos pesados siguiendo la estela de su padre en el mundo pugilístico y contando con la inestimable ayuda de, ¿quien si no? Rocky Balboa, continuando así el legado del apellido Creed que según parece tendrá una continuación más, de momento, en la gran pantalla. Estaremos atento a Adonis Creed Johnson, heredero además de sus dotes como boxeador, del orgullo irracional de su padre que no le lleva a buen puerto en ocasiones.