Se habló en este blog de...

4.12.06

El perfume: historia de un asesino.

Leí El perfume de Patrick Süskind hace ya una década o más, y aunque mi memoria no alcanza para juzgar con certeza la fidelidad de su adaptación cinematográfica, recuerdo bien que la novela no me pareció una obra maestra, sino más bien un bestseller entretenido, un relato capaz de atraer al lector durante esos largos trayectos en metro o tren, en la rutina urbana.

Adaptar una novela cuya esencia es olfativa a la pantalla resulta una tarea titánica, máxime cuando los cines carecen aún de tecnología para transmitir aromas. Sin embargo, la película consigue despertar en la imaginación del espectador una sinfonía de olores: desde la pestilencia más intensa de los rincones más sombríos del París del siglo XVIII, hasta los perfumes más sutiles y exquisitos que envolvían a la burguesía.

La historia de Grenouille y su búsqueda obsesiva por crear el perfume perfecto, capaz de dominar la voluntad humana, se desarrolla con un ritmo aceptable, entre asesinatos y obsesiones, envuelta en un halo de misterio. El elenco, con figuras como Dustin Hoffman y Alan Rickman en papeles secundarios, aporta solidez, y Ben Whishaw, en su papel protagonista, aunque aún poco conocido, encarna con sensibilidad al enigmático Jean-Baptiste.

No obstante, la película tropieza en su tramo final. La escena de la orgía multitudinaria, un momento crucial en la novela, se diluye en la pantalla, quedando relegada a un plano menor, casi trivial, desprovista de la potencia y la gravedad que merecía. Esta carencia empaña lo que podría haber sido un cierre memorable y profundo.

En definitiva, la película no desmerece, pero como sucede tantas veces, la sombra de lo incompleto persiste, y el sueño de una adaptación perfecta queda a medias, eclipsado por un desenlace que se queda corto frente a la magnitud de la obra original.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Interesante tu punto de vista

Maya dijo...

Lo que más impresiona de la peli es su banda sonora te deja un cuerpito malito malito.